Si el destino de todo resulta extinguirse y desaparecer inevitablemente, dudo que antes de haber alcanzado su máximo esplendor. Porque en estos mundos donde la vida toma formas extrañas, y el amor se representa con sencillos actos, sería demasiado tedioso hasta para Dios deshacerse de estas extrañas criaturas llamadas humanos.
Besos, Kara.
No hay comentarios:
Publicar un comentario